16.4.10

Vinculación de Tlapa con los acontecimientos ocurridos durante la Guerra de Independencia y la Revolución de 1910

Guerra de Independencia
Con la revolución de Independencia al igual que en todo el estado, en la región de la Montaña y en Tlapa como centro económico político de la región también se dieron importantes hechos de armas que contribuyeron a la Independencia del país. Morelos y Guerrero sobre todo libraron luchas importantes en esta zona.
Morelos había tomado Chilapa el 20 de agosto de 1811, después de permanecer tres meses ahí, se dirigió hacia Tlapa en los primeros días de noviembre de 1811.
Tomó la plaza sin combatir pues los realistas se habían retirado hacia Oaxaca; aquí se le unió el Vicario del pueblo, el padre Mariano Tapia, quien antes había servido a los realistas, lo nombró coronel, ordenándole que levantara un regimiento con los habitantes de la población, el indio Victoriano Maldonado cuyo valor y resolución le serían útiles posteriormente, al mando de un regimiento de tlapanecos también se le incorporó en esta plaza.
Estacionado aquí un emisario del sacerdote Antonio Palafox acudió a ofrecerle el indulto, encontrando como es obvia la negativa del jefe de la Revolución.
De Tlapa, el General Morelos marchó hacia Chiautla que era defendida por el español Mateo Musitu.
El General Guerrero, consumador de la Independencia y que se había unido a la causa libertaria en octubre o noviembre de 1810, escenificó en esta región importantes hechos de armas.
En marzo de 1814, Tlapa había sido recuperado por los realistas. Gabriel Armijo “restableció a las autoridades realistas de estos rumbos, tratando de resguardar la entrada de la Mixteca, situó en esta población al capitán Moya, en lugar del de igual graduación Montoto”.
En el mes de mayo, Guerrero alcanzó algunos triunfos sobre La Madrid, en algunos lugares cercanos a Tlapa.
En agosto, el realista Robles derrotó en las inmediaciones de dicha población al jefe insurgente Victoriano Maldonado que al caer prisionero fue inmediatamente fusilado, después de varios encuentros pequeños con las fuentes realistas su objetivo era Tlapa que tenía gran importancia estratégica: Constituía la llave de las comunicaciones entre las comandancias del Sur y la provincia de Oaxaca, con Puebla. De aquí que Guerrero se empeñara en tomarla. Mandó de adelantada a su segundo Juan del Carmen para que merodeara por los alrededores de la Villa.
El 20 de junio de 1815 Juan del Carmen le avisó que el enemigo se halla cerca. Apresuró la marcha para apresurar al del Carmen, pues la batalla había comenzado. Después de fiero combate, donde nadie pedía ni daba cuartel la energía de los insurgentes se impuso, sin descansar se dirigieron con sigilio, aprovechando la oscuridad de la noche para que al día siguiente la Villa de Tlapa amaneció sitiada. Guerrero rompió el fuego al despuntar el alba estrechando en un círculo con sus hombres la codiciada plaza.
Día tras día los combates se sucedían hasta contar veinte en que el sitio no dejó mover a los realistas.
Al interceptar un correo supo que Armijo se dirigía a auxiliar a los sitiados, ocupando la loma llamada la Caballería. Presuroso, Guerrero se posicionó de ella y mandó 100 hombres al camino de la Cruz donde Armijo lo sorprendió al encontrar a los insurgentes tomando un breve descanso. Sin embargo, se recuperaron de inmediato reaccionando con bravura y lo que parecía una derrota se convirtió en victoria. Armijo se vio obligado a huir rumbo a Olinalá.
Guerrero entonces decidió apretar el cerco sobre Tlapa y cuando estaba a punto de tomarla ante la inminente capitulación de Carlos Moya, Morelos que escoltaba el congreso hacia Tehuacán, mandó llamarlos en su auxilio. Guerrero tuvo que abandonar el sitio para acudir en ayuda del generalísimo, sin embrago ya nada pudo hacer pues este había quedado prisionero (Salazar, 1983, pág. 43)